Cuando fui a realizar mis estudios universitarios, tenía aproximadamente unos 18 años y claro en esa época uno es mucho más audaz y capaz de realizar cosas que hoy muy difícilmente lo haría, voy a empezar una serie de relatos de cosas que me pasaron en mi juventud.En ese tiempo tenía una novia, con un cuerpo espectacular la verdad es que no había tenido sexo con ella, era todavía colegial, sin embargo dejaba que mis manos recorran por todo su cuerpo, le encantaba cogerme la verga y chuparme hasta dejarme sin semen, realmente era un placer muy grande, nunca había ido para su casa, siempre pasábamos en mi departamento; sin embargo un día me pidió que le fuera a dejar a su casa, ahí fue cuando conocí a su hermana, eran muy parecidas, por alguna circunstancia le llamo a mi novia su mama y yo me quede en la puerta de la casa con su hermana y claro iniciamos una conversación, me pidió que le ayudara con un deber de la universidad y nos citamos para el siguiente día.
Nos encontramos en la universidad, le dije que en mi departamento habían unos buenos libros y que mejor estudiáramos ahí, ella acepto gustosa, cuando llegamos le ofrecí una copa de vino y empezamos a estudiar, al cabo de un rato nos habíamos terminado la botella de vino y la verdad estábamos acalorados, ella se abrió los botones de su blusa dejando ver unos pequeños pero bien formados senos, le pedí que descansáramos un rato y fuimos a ver televisión, le manifesté que era muy bonita y que su cuerpo era muy hermoso, ella se sorprendió era la primera vez que le decían algo así, me contó que no había tenido enamorados, le dije que se vaya acostumbrando porque iba a tener muchos pretendientes, se rió y me comento que nunca le habían dado un beso, yo aproveche eso y le dije que también podía enseñarle a besar, inmediatamente le di un beso largo a lo que respondió torpemente, pero notaba que se dejaba llevar, le pase mis manos por encima de su blusa topando suavemente sus pezones lo que le empezó a excitar, mis manos ya recorrían sus desnudas piernas y le topaban su rajita humedecida por la excitación, le tome suavemente su mano derecha y le enseñe que debía empezarme a acariciar mi pene que para ese rato ya estaba bastante crecido, le abrí los botones de su blusa y quedaron al descubierto sus dos preciosos senos, les saque del sostén y empecé a chupar sus pezones, muy pronto se empezaron a endurecer, para eso yo ya había dejado al descubierto mi verga y le tome de la cabeza dirigiendo su boca a mi miembro que se encontraba totalmente erecto, le dije que pasara su lengua despacito, pero aprendió muy pronto y se metió todita la verga en su boca y comenzó a succionar, yo pensé que me corría, pero procure aguantarme, le quite su falda y le retire su pequeño hilo dental dejándola completamente desnuda, hicimos un perfecto 69 y alcanzo un hermoso orgasmo dejándome en mi boca todos sus jugos vaginales, mientras hacíamos el 69 yo le había penetrado un dedo en su culito y al protestar le dije que quería meterle mi verga en su culito ella me dijo que lo hiciera suavemente, le puse crema y le introduje primero un dedo, luego dos y cuando ya había alcanzado una buena dilatación le introduje mi verga, ese instante ella supo lo que era tener una verga en su culo, su placer era tan grande que empezó a gemir desesperadamente y a moverse a gran velocidad, ya no resistí mas y termine dentro de su culito, mi semen le lleno completamente, luego prendí un tabaco y le di una copa de vino.
Me pregunto si eso hacía con su hermana, le conteste que no, que ella solo se limitaba a mamarme la verga y a comerse el semen, me dijo que quería comerse también mi semen y empezó a chuparme, muy pronto logro que se me parara y termine en su boca, me lamió la verga y se trago todito mi semen, ahí fue cuando me dijo que no le contara a su hermana.Yo le prometí no contarle a cambio de que volviéramos a repetir lo mismo, ella accedió y me dijo que había sido el día más hermoso de su vida porque por primera vez había sido de un hombre, yo le dije que todavía no le había introducido por su vagina y me respondió que eso era para el hombre que sería su esposo.
Nos encontramos en la universidad, le dije que en mi departamento habían unos buenos libros y que mejor estudiáramos ahí, ella acepto gustosa, cuando llegamos le ofrecí una copa de vino y empezamos a estudiar, al cabo de un rato nos habíamos terminado la botella de vino y la verdad estábamos acalorados, ella se abrió los botones de su blusa dejando ver unos pequeños pero bien formados senos, le pedí que descansáramos un rato y fuimos a ver televisión, le manifesté que era muy bonita y que su cuerpo era muy hermoso, ella se sorprendió era la primera vez que le decían algo así, me contó que no había tenido enamorados, le dije que se vaya acostumbrando porque iba a tener muchos pretendientes, se rió y me comento que nunca le habían dado un beso, yo aproveche eso y le dije que también podía enseñarle a besar, inmediatamente le di un beso largo a lo que respondió torpemente, pero notaba que se dejaba llevar, le pase mis manos por encima de su blusa topando suavemente sus pezones lo que le empezó a excitar, mis manos ya recorrían sus desnudas piernas y le topaban su rajita humedecida por la excitación, le tome suavemente su mano derecha y le enseñe que debía empezarme a acariciar mi pene que para ese rato ya estaba bastante crecido, le abrí los botones de su blusa y quedaron al descubierto sus dos preciosos senos, les saque del sostén y empecé a chupar sus pezones, muy pronto se empezaron a endurecer, para eso yo ya había dejado al descubierto mi verga y le tome de la cabeza dirigiendo su boca a mi miembro que se encontraba totalmente erecto, le dije que pasara su lengua despacito, pero aprendió muy pronto y se metió todita la verga en su boca y comenzó a succionar, yo pensé que me corría, pero procure aguantarme, le quite su falda y le retire su pequeño hilo dental dejándola completamente desnuda, hicimos un perfecto 69 y alcanzo un hermoso orgasmo dejándome en mi boca todos sus jugos vaginales, mientras hacíamos el 69 yo le había penetrado un dedo en su culito y al protestar le dije que quería meterle mi verga en su culito ella me dijo que lo hiciera suavemente, le puse crema y le introduje primero un dedo, luego dos y cuando ya había alcanzado una buena dilatación le introduje mi verga, ese instante ella supo lo que era tener una verga en su culo, su placer era tan grande que empezó a gemir desesperadamente y a moverse a gran velocidad, ya no resistí mas y termine dentro de su culito, mi semen le lleno completamente, luego prendí un tabaco y le di una copa de vino.
Me pregunto si eso hacía con su hermana, le conteste que no, que ella solo se limitaba a mamarme la verga y a comerse el semen, me dijo que quería comerse también mi semen y empezó a chuparme, muy pronto logro que se me parara y termine en su boca, me lamió la verga y se trago todito mi semen, ahí fue cuando me dijo que no le contara a su hermana.Yo le prometí no contarle a cambio de que volviéramos a repetir lo mismo, ella accedió y me dijo que había sido el día más hermoso de su vida porque por primera vez había sido de un hombre, yo le dije que todavía no le había introducido por su vagina y me respondió que eso era para el hombre que sería su esposo.
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