miércoles, 26 de junio de 2013

APARECE MARI EN MI VIDA

Me instale en una casa que arrende, tenía piscina era muy cómoda, yo disfrutaba mucho además se encontraba cerca de la playa, lo que me permitía tener un relax, a quienes me arrendaron la casa les había pedido que me consiguieran una señora para que me cocine y arregle la casa, en efecto desde el principio estaba bien atendido la señora trabajaba de lunes a sábado conmigo y el domingo se regresaba a su casa. Un día me dice que ya no podía continuar trabajando, porque su hija había terminado el colegio y quería estudiar la universidad, y debido a eso, ya no podía quedarse a trabajar conmigo, le digo mira en el cuarto que tu ocupas yo creo que si entra otra cama tráela y que viva aquí contigo y así yo puedo ayudarte a correr con los gastos, me agradeció mucho y me dijo que el fin de semana lo iba a traer. Efectivamente llego con su hija y me presento se llamaba Mari, a primera vista era una jovencita muy agraciada alta un poquito delgada pero con sus atributos bien puestos, almorzamos y me fui a nadar en la piscina hacía un calor bien fuerte y me refrescaba, llegaron las dos y me dijeron patrón no hemos comprado la cama, le dijo no te preocupes acomódale en el cuarto de las visitas que quedaba en mí mismo piso, me dice pero patrón no está bien, mejor que duerma en mi cama, le digo mira vamos a darle comodidad a tu hija para que sea una buena estudiante en la universidad; en la noche mande a traer una pizza y comimos los tres en la cocina, le digo ya está instalada tu hija, me dice si patrón pero quiero que me adelante mi sueldo para irle a comprar ropa por que casi no tiene nada, ese rato me acorde de lo que me paso con la hermana de mi mujer y le dije no te preocupes yo mañana salgo con Mari y le compro la ropa que ella quiera. Al día siguiente salimos y le dije a mi empleada que regresaríamos con la noche porque iba a aprovechar que salgo para hacer unos trámites, fuimos a la ciudad y le invite a desayunar mientras nos servían, le dije espérame un rato voy a esas cabinas hacer un par de llamadas, hable con mi mujer y con los muchachos todos estaba en regla no habían inconvenientes. Nos servimos un ceviche de langosta y un par de cervezas y empezamos a entrar en confianza, me dice que primera vez que comía eso y que estaba muy rico, me dice que donde vivía a veces comían y otras no que sus tíos eran muy duros y siempre le vivían amenazando que nunca había salido con chicos y peor tener enamorado, yo le conté mi verdad a medias le dije que pensaba estar unos meses aquí, pero que debía irme a continuar con mi vida errante. Fuimos a comprar ropa le dije que coja toda la que quiera, la dependiente al oír eso le paso como unos 10 vestidos y Mari se lució pues se probaba y me enseñaba para que le dé el visto bueno, también le dije que le pasara lencería fina, eso no se la probo solo me enseño pero me imaginaba como le iban a quedar pues todas eran tipo tanga, yo empezaba a soñar con tenerle, pagamos la cuenta y salimos a almorzar nos fuimos a una playa alejada a comer en una cabaña de pescadores que me habían dicho que tenía las mejores langostas, pedimos dos platos y tomamos unas cuatro cervezas, habíamos hecho una excelente amistad era una buena conversadora me entretenía mucho con sus ocurrencias y a veces con sus ingenuidades. Una vez terminado el almuerzo le sugerí ir a la playa a bañarnos, acepto pero me dijo que no teníamos ropa de baño, en efecto fuimos a un almacén compramos y salimos a la playa, una vez cambiados pude apreciar realmente el hermoso cuerpo que tenía no era exuberante, más bien era menudita pero media cerca al 1.70, cogidos de la mano entramos al mar y jugamos como dos niños, hubo un rato en que nos toqueteamos, pues por el juego le abrace y cogí sus senos, ella se apegó a mi verga con su culo, lo que hizo que reaccione inmediatamente y sentí como que le había gustado pues no hizo ningún acto de reproche, seguimos nadando y cada vez aprovechábamos para toquetearnos, hubo un rato en que me dice si te gusto, le digo claro eres muy bonita, porque no me besas yo nunca he besado a un hombre, le tome en mis brazos y le bese, le abrace y le cogí sus senos y nalgas, estábamos dentro del mar por cierto mi verga ya había reaccionado y le empecé a puntear, le tome su mano y le hice coger mi pene y que lo acaricie mientras nos besábamos, le digo date la vuelta y apoya tus nalgas en mi pene, ella lo hizo y le empecé a frotar sin introducirle o sea la verdad no quería hacerle daño, mientras más nos excitábamos más nos frotábamos hasta que finalmente ella termino y yo expulse todo mi semen. Regresamos a la casa y en el camino le fui diciendo que ese sería nuestro secreto que no debía enterarse su mama, ella estuvo de acuerdo y me dijo porque no salimos mañana nuevamente para estar juntos, me gustó mucho estar contigo.

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